Cómo se entiende el día Mundial de la Libertad de Prensa, en un país donde la violencia hacia los periodistas en su mayoría proviene de la lucha contra el crimen organizado, cada día son más notorios los intereses político-corporativos-mediaticos; y los secuestros, desapariciones y asesinatos de comunicadores proliferan bajo una sombra de impunidad instucionalizada, en la que parece imposible encontrar responsables.
Quisiera dormir casada con la idea de un México donde las garantías no se rebajan sólo a letras que se prostituyen en beneficio de unos pocos y esperanzada a que valorado el trabajo, los pauperrimos sueldos no serán más el pretexto de los que justifican la autocensura. Despertar, tomar café, leer las verdades de una prensa que se festeja libre, plural e independiente, para ya sin el amargo sabor del miedo, posiblemente volver a aceptar abiertamente que deseo algún día estar en sus zapatos.